No conozco una práctica espiritual más fructífera para llevar mi relación con Dios desde mi cabeza hasta mi corazón que la adoración.

La música es un lenguaje del corazón más que de la boca. Es un regalo de comunicación en el que nuestras almas pueden escuchar y responder a la verdad de Dios y de nuestra experiencia humana. Y en una expresión del cristianismo posterior a la Ilustración del mundo occidental, en la que sobrevaloramos nuestro intelecto e infravaloramos el diseño de Dios para que nuestra intuición y encarnación de la fe escuchen la verdad de Dios, necesitamos un renacimiento de la adoración no sólo como un acto colectivo, sino aún más como una práctica realizada en privado.

Gran parte de nuestra experiencia colectiva en materia de adoración se centra en el fin de semana. Enormes presupuestos, canciones magistrales, músicos con talento, líderes carismáticos… nuestras expresiones dominicales de adoración, cuando se hacen con autenticidad, pueden ser una experiencia increíblemente transformadora.

¿Pero qué pasa con el lunes?

¿Cómo adoramos cuando el glamour del domingo desaparece y la vida real se pone en nuestro camino? ¿Cómo facilitamos una conexión significativa con Dios, su Espíritu con el nuestro, para poder afrontar el caos y el bullicio de la familia, el trabajo y la vida?

En Primeros15 estamos proporcionando recursos a más de 1,7 millones de creyentes en todo el mundo, guiando al pueblo de Dios hacia un tiempo significativo de adoración, lectura y oración cada día. Y hasta ahora, hemos buscado en nuestro repertorio colectivo de canciones cristianas una adoración que se ajuste al contexto en el que se encuentran nuestros lectores y oyentes, un rincón (a veces) tranquilo con una taza de café y un diario.

La adoración significativa puede ser una parte diaria de nuestra experiencia de vida y fe, no a modo de obligación, sino de invitación. Puedes recordar y experimentar la realidad de la bondad, el carácter, el poder y la presencia de Dios en los primeros momentos de cada mañana. Puedes conectar con Dios a través de la adoración, y ver cómo esa conexión te lleva a través de los inevitables altibajos de tu día.

En Primeros15 queremos ayudarte a conectar con Dios a través de la adoración diaria.

Espero y oro para que en sólo cinco minutos puedas sentirte más cerca y más conectado con Dios, y que tu conexión con tu Creador y Sustentador sea la corriente que te conduzca en el camino a través de lo que te suceda hoy.